Como la lámpara
vertida desde un tigre
y un gemir de trompas
rectangulares en el oído
zurdo
mnemotécnica
de toda
y toda la esa
ese yugo
que hace
cuando mueve su boca
de un lado a otro
ello y tan ello
garigoleando
que tu reino
es tan pobre
como estas horas
en la que un
fantasma repta
desde tu espalda
para moderte al oído
que lo real
sucedió allá
en este pasaje
donde esta
escritura está en
ese pasaje
que quedo atrás
de una boca
merodeando su
tan táctil
espesura en
lo que ya no sé.
Escuchar
mejor escuchar
como dos sonidos
se deshacen
en un constante
ballet.
21 jul 2013
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